miércoles, 23 de septiembre de 2009

La verdad mas cercana, mas negada

Esta palabra que fue es y será motivo de problemáticas inefables tanto en la filosofía como en la vida de todo mortal, me generó profundos cuestionamientos acerca de su existencia, su origen, su diversidad hasta de su unicidad.
La etimología remite al termino ´´veritas´´ ( a su vez este proviene del griego aletheia, compuesto de la negación a y la raíz del verbo lanthano que significa ´´encontrarse oculto; el significado final es ´´aquello que resulta patente´´.
Yo me quedo con estas últimas palabras, ´´nuestra patente, nuestra verdad, es la única de real certeza. Con esto no me refiero a una ´´óptica´´ de la verdad a través de los sentidos sino ´´nuestra verdad´´ aquello que solo nosotros podemos aceverar y es de nuestra profunda aprehensión. Aquello que por momentos suele avergonzarnos, aquello que fue por acción u omisión. Pensamientos no deseados, oscuros propios de nuestra singularidad. Anhelos, sueños etc. Todos son fuentes de nuestra verdad.
Sin embargo, y muy a nuestro pesar, que olvidada esta nuestra verdad. Lo ´´no oculto´´ paradojicamente lo mantemos bajo las sombras.
¿Qué verdad podemos desentrañar si la nuestra la mantenemos oculta? ¿que podemos iluminar si empezamos cegando la propia verdad, la de uno?
Tenemos esa vocación de llegar a la verdad, de decirla, pero siempre y cuando sea ajena.
Aquellos que desenmascaran su verdad y se sujetan a la crítica de aquellos que solo ven verdades ajenas, son reales participes de su vida y al menos poseen esa momentánea libertad de saber que están en comunión con su verdad.

Espectros

Los fenómenos físicos que suceden en la naturaleza me despiertan ese juego de ´´hacer analogía´´ con el pensamiento abstracto, las ideas. En este caso me sumerjo a la creación de espectros.
Cuando un haz de luz blanca (solar, o de un lamparita) incide sobre un prisma transparente, sucede lo que se conoce como ´´descomposición de la luz´´ y lo que se obtiene es un espectro de luz. Es una solución de continuidad de las diferentes longitudes de onda que revisten este haz que en el caso de la luz blanca son todos.
Sin ánimos de seguir aburriendo con cuestiones físicas, este fenómeno me llevó a como nos cuesta pensar sin usar extremos. Tomamos decisiones, dirimimos en cuestiones pensando en máximos y mínimos. El mismo Platón pensaba que era justo e injusto. ¿es correcto o incorrecto?
¿Bueno o malo? La iglesia nos plantea un cielo y un infierno.
A la hora de pensar nos sentimos seguros en un lugar, ubicarnos en algún extremo, nos da esa ilusión de indentidad. Sin embargo yo creo que el buscar extremos, de cualquier índole nos limita.
Pensar en solución de continuidad es todo lo contrario. No relativiza lo que pensamos sino que nos diversifica, nos otorga mas opciones. Obviamente que esto es exhaustivo y por momentos la facilidad sería el reducto de dos parcialidades, ergo es preferible siempre tener mas recursos para enfrentar cualquier vicisitud. Creo que de eso se trata, no limitar nuestra forma de pensar a dos parcialidades sino ampliarlas en un espectro de pensamiento.

De la palabra a la acción

Como hábito de fin de semana suelo leer la revista dominical de La Nación y automaticamente busco la sección de Sergio Sinay en la cual hace una devolución a las inquietudes planteadas por los lectores. En esta oportunidad, este sociólogo, que lo entiendo más como filólogo y filántropo, otorga una mirada a la forma de vida que se estuvo gestando en las últimas décadas del s. XX y el incipiente s. XXI. Destaca claramente como la vida multifrénica, el deseo de consumo y la escases del tiempo, doblegan el estilo y la forma de vida del hombre actual.
Como es lógico invita al lector a la reflexión y otorga algo así como una profilaxis a este ´´mal´´.
Hace mención a lo que denomina como ´´menosismo´´. Este sugiere hacer menos pero más efizcamente y tener de acuerdo a las necesidades y no para suplir el deseo. Cita el siguiente ej; la sensación de hambre es una necesidad, debemos comer para vivir. El apetito es el deseo, ´´deseo comer un caramelo´´.
Ahora bien, lo que me ocurre al leer este tipo de notas, es que siento el abismo al pensar la puesta en práctica. Son situaciones que en la mayoría de los casos son ideales, y el sentimiento siguiente es la impotencia. La elocuencia que a través de la lectura surge en una voz en ´´off´´ en la conciencia de uno, es muy atractiva y con la imaginación que este cambio radical en nuestras vidas se haga presente.
¿Por qué existe esta brecha entre la palabra y la acción?
En este caso la brecha es mayor porque lo que ocurre es uno esta habituado al frenesí y queremos todo ya y ahora y justamente es todo lo contrario...estamos frente a un cambio que inexorablemente lleva mucho tiempo, tiempo de maduración.
Justamente ahi encuentro una clave, y pasar de la palabra a la acción es un camino y un trabajo que debemos animarnos a recorrer. Tomarnos esos tiempos para frenar esta locura circundante y que las palabras que recorren nuestro pensamiento no se queden allí sino hacerlas acción y ver que pasa. Es en la real incertidumbre que se vive, y no en las vagas certidumbres.

lunes, 14 de septiembre de 2009

Reflexión ante el hecho

En muchas oportunidades y recientemente fui víctima de la inseguridad que a título de los medios azota la realidad de los argentinos.

El último atraco siguió un modus operandi estándar (uno con el tiempo se torna casi en experto) y consiguió como siempre la frase que me aburre y sirve de consuelo para muchos: ¨Y agradece que te hicieron nada´´.

Mi conciente es coherente también, a una clase social media y se manifestó en sentencias sumamente tristes como ser: ´´que hijos de puta, si estaban mejor vestidos que yo´´ como si eso fuera condición a la hora de que uno lo asalten, que sea pobre el que delinque.

Sumado al sentimiento de bronca, me invadió la indignación debido a que uno se siente no merecedor del hecho, por creer que me ubico en la vereda de aquellos que ejercen el bien. ¿Si creo no hacer mal, porque me sucede este infortunio? En ese instante comencé a pensar en esta cuestión del bien y del mal. ¿Que es lo bueno y malo? ¿Existe el bueno y el malo?

Nietzsche en ´´Genealogía de la moral´´ describe como en sus inicios el concepto de ´´bueno´´ estaba adjudicado a las clases altas, a la nobleza. La antípoda, la plebe era lo malo:

´´Antes bien fueron los ¨buenos¨ mismos, los nobles, los poderosos, hombres de posición superior y elevados sentimientos quienes se sintieron y se valoraron así mismo en contraposición a todo lo bajo, abyecto, vulgar y plebeyo.´´



Existe este concepto en nuestro imaginario, demonizando a la clase baja , cargando a los marginados como aquellos que ejercen los males de nuestra sociedad. Las justificaciones son sabidas y nos sumergimos en cuestiones como falta de educación y trabajo. En parte es real, y aquellos mas vulnerados lógicamente están propicios de ser corruptibles. Por otro lado podemos tener un discurso más socialista y decir que es la desidia, el demérito y la corrupción de las clases altas las que generan la marginalidad de las clases mas bajas.

Yo no me ubico en ninguna instancia antes mencionadas. No creo mucho en esta cuestión de lo bueno versus lo malo. Aquel que se considera bueno no lo es del todo y así el malo tampoco lo es.

En este caso de inseguridad así como tantos otros, creo que todos somos víctimas. El casi adolescente que me robó y yo somos damnificados. Víctimas de un sistema perverso en el que todos perdemos, desde el momento en que estamos ´´entretenidos´´ con cuestiones que nadie debería y nublamos toda posibilidad de ver la realidad. La consecuencia de todo esto es un juego en el que todos y ninguno tiene razón y como bien sabemos cuando perdemos la razón no hay manera de evolucionar hacia un cambio de real profundidad. Abandonamos la reflexión y la contemplación y tan solo reaccionamos.
Así es como esta sociedad de reaccionarios se limita a eso, frente a una acción tomar revancha e ir por mas. Así es cuando nos matan, matamos y solo nos queda la formula de Louis Guillot.
Por eso es que insisto en contemplar y reflexionar aunque nos gobierne ese deseo propio de una clase de despreciar al resto.

lunes, 7 de septiembre de 2009

Derecho a saber

Todos y cada uno de nosotros bien conoce los derechos humanos. A pesar de saber construir una ética que respalda y resguarda estos derechos, también es de conocimiento colectivo la transgresión de los mismos. No hay que ser un iluminado para darse cuenta que muchos seres humanos no acceden a cuestiones mínimas que dignifican la vida.
¿Hemos avanzado en esta materia desde la Inglaterra cuya actividad mas rentable era el tráfico negrero?
¿Seguiremos en un despotismo pero enmascarado con tratados y organizaciones no gubernamentales que abogan por los derechos de todos los hombres?
En otras épocas, la misantropía se manifestaba desde el desconocimiento y la ignorancia. Cuando los conquistadores se toparon con los americanos, no los concebían como pares, eran vistos como seres inferiores. El solo hecho de que vistieran con pocas ropas y con una idiosincracia pecaminosa, causaba escozor y asomobro en los verdaderos bárbaros. Ahora bien, desde mi humilde mirada, el siglo XXI entre otras cosas, supone el despojo de estas ideas misantrópicas, escuetas y limitadas a una mente inquisidora. Sin embargo todos conocemos en las condiciones que viven las comunidades aborígenes ( la misma palabra los destierra, etimológicamente significa sin hogar, sin lugar). ¿Porque seguimos cuestionando y discriminando con el mismo encono de los barbaros del iluminismo, a los americanos cuyo origen y genealogía no es europea?
¡Cuan hipócritas somos al debatir sobre derechos humanos! ¿Porque seguimos pensando que la muerte de miles de africanos vale menos que la de un ingles? ¿Porque nuestra historia oficial sigue revindicando a un xenófobo como lo fue Sarmiento? ¿A quien le importa la vida de un villero argentino cuando las únicas vidas que provocan primicias son de clase media, media alta?
La reflexión que se me genera a partir de estas realidades y cuestionamientos, es que esta actualidad es aun mas peligrosa que la Europa inquisidora, La Argentina de la campaña del desierto, La Alemania del antisemitismo nazi y muchos otros espejos de transgresión de derechos humanos.
En la actualidad existe el mas triste agravio a los derechos humanos, el silencio. Pareciera que las cosas suceden y se encausan de una manera mas civilizada y que la barbarie de otros tiempos no atormenta.
Son los mismos transgresores de los derechos humanos los que tratan de solapar y vender al mundo ideas de civilidad.
Por eso antes de luchar por los derechos humanos deberíamos defender el derecho a saber y es algo por lo que nosotros mismos debemos encaminarnos.

jueves, 3 de septiembre de 2009

dialogos

Cotidianamente me pregunto quien es la voz que dia tras dia, hora tras hora, minuto a minuto entabla dialogos a partir de mis propios sentidos. Cuando niño la mera pregunta me llenaba de un escalofrio electrizante que recorria todo mi ser.




¿De donde salió este sujeto que entabla dialogos cuando me encuentro solo?



Es la constante compañia que nos hace sentir la soledad. Nos suele dirigir nuestro accionar, nos envuelve con mensajes represivos, nos da tranquilidad en algunas ocasiones.





Nuestro yo, el muy cuestionado por nosotros mismo. ¿Será la expresión de los que algunos llaman ´´alma´´?





Sin entrar en un estado demencial, esquizofrenico, uno en oportunidades entabla dialogos...con este yo, con nuestra alma...


Yo lo encuentro como un ser atrapado en mi cuerpo que lo dirige a ´´piacere´´ y le da vida.


y a veces eso suele enojarme, porque por más que una terapia logre persuadirlo, el tiene su propósito y barre con el todo intento por convercerme que tengo el control


¿cuando será el dia que logre hacer las paces con él, o la vida misma se trata de esa lucha interna y es lo que mantiene en pie ante la adversidad?


¿existirá esa paz con el alma la que tantos gurú esprituales hablan y predican?



El acertado y calificado Nietzsche sentencia:


´´en tiempos de paz, el hombre hace la guerra sobre si mismo.´´

¿Es a esta voz con la cual hacemos la guerra? ¿Cuando no logremos escucharla, habremos muerto? ¿Perderemos nuestra alma cuando la ´´voz´´ sea taciturna, imperceptible a los sentidos? ¿se podra diluir esta voz en vida? ¿o sera hasta que cesen los latidos del corazon, ella también se acallara?

Tanto como aquel chico que una vez fui, todavia siento el escozor cuando resuena, retumba , y se hace escuchar esta voz que entabla dialogos conmigo en la profunda soledad